“Si bien la alta costura está estrechamente vinculada a la idea de perfección y al dominio de cada detalle, quise trasladar 70 años de creaciones de Dior a un escenario inesperado. Las calles de Nueva York, con su marcado contraste, revelan emociones insospechadas".
Peter Lindbergh, Dior/Lindbergh, Colonia, Taschen, 2019.
Influenciado por la fotografía documental estadounidense de los años 30 y 40, Lindbergh abrazó el arte de la “fotografía callejera”, en la que prima captar la espontaneidad del instante. Las siluetas de Christian Dior y sus sucesores, como Maria Grazia Chiuri, cobran vida “en el movimiento de la vida”, en palabras de Lindbergh, lo que refuerza aún más la modernidad del estilo Dior.
Sus imágenes ofrecen un contraste sorprendente entre tiempos y espacios: pasado y presente, París y Nueva York, la alta costura y la calle, perfección e imperfección. Organizada en el marco de una publicación editorial, la sesión permitió a Lindbergh trabajar en series de fotos dedicadas a un solo look, logrando así un impresionante efecto cinematográfico en cada línea.